Cortes de Pallás

CULTURA IBÉRICA


No cabe duda de que los autores de las pinturas rupestres levantinas de la Cueva de la Araña de Bicorp (escena de recolección de la miel) y de las pinturas de caza de la Cueva de las Montesas de Jalance, ambas en términos lindantes con el de Cortes de Pallás, andarían por los altos de La Muela, la fosa del cañón de nuestro río y las laderas de la Muela del Albeitar; en sus continuos desplazamientos como cazadores recolectores. Pero, de ello, no tenemos recuerdo material.

Cortes de Pallás es un lugar ubicado entre montañas, por lo tanto lo que más hay en él son piedras; es decir, rocas. Sus peñascos se deben a que ocupa el centro del Sistema Ibérico; en su parte Sur o final. Una alineación montañosa, de tipo alpino (como los Alpes); que se formó en la época geológica Terciaria. Debido ello (millones de años por medio…) al movimiento de las placas tectónicas o fracturas del subsuelo y por hallarse en el borde mismo de la Meseta.

Como todos los pueblos de vida agropecuaria, Cortes de Pallás tiene adaptadas sus fiestas y celebraciones al calendario de la actividad agrícola; compaginándolas con cada memorable efeméride de la tradición cultural cristiana, así: Reyes Magos, San Antonio, flores de mayo, Semana Santa, Virgen de Agosto, Santa Cecilia, San Isidro, El Pilar, Todos los Santos, Navidad…

Cortes de Pallás es un municipio de interior de la Comunidad Valenciana que reúne numerosos y variados atractivos turísticos, que a bien seguro satisfacen a quienes visitan su término.

La naturaleza adquiere su máxima expresión en los parajes y paisajes que se encuentran repartidos en su geografía.

Su embalse y singulares características (12 kilómetros de longitud, nivel de las aguas constante, abundante pesca, navegabilidad), su patrimonio histórico-cultural (castillos de Chirel, La Pileta, Ruaya, Otonel; Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles; Casa del Barón), su patrimonio tecnológico (Centrales hidroeléctricas de la Muela -subterránea y Cortes II), su fauna (Reserva Nacional de Caza de la Muela de Cortes), su red de rutas (incluído un tramo de la GR-7), su gastronomía (gazpachos, ajo arriero, tortas, etc.), y productos típicos (miel, embutido y carnes), contribuyen a que sea considerado un referente destacado del turismo rural valenciano.